El pasado 24 de enero celebramos nuestro primer certamen de la feria de la tapa. Hay que reconocer que el nivel, superó con creces las expectativas.
Por nuestras mesas discurrieron muestras de verdadera alta cocina, destacando la calidad de las materias primas y la presentación de las mismas, con una elaboración muy cuidada tanto en tapas frías como calientes.
Bueno, fuera de pijadas, que estaban muy buenas, había muchas y no veas como entraban con la cervecita.
Al acto acudieron cofrades y amigos, y sirvió para inaugurar nuestra sede, que aunque sin suficientes recursos todavía, contó con una organización notable (a destacar los que se pegaron el currele de limpiar antes y después). Y la verdad es que aunque sólo ocupamos la planta de arriba, estuvimos muy comodos.
A pesar del gran nivel de todas las tapas presentadas a concurso, se decidió que la ganadora fuese la deliciosa tapa de morcilla de Ainoa, con una mención muy especial al formidable Cocido de Santi.
Después, durante la sobremesa, como era de esperar, se organizó una timbita donde los cofrades pudieron demostrar su maestría con las cartas.
En general, cabe destacar que fue un inicio muy positivo del que la gente salió muy contenta y del que tenemos que aprender, corrigiendo algunos pequeños detalles en los que hemos podido fallar, para que las futuras reuniones sigan siendo tan memorables como ésta. 
